Si uno se para un segundo
a pensarlo, ¿qué es la vida si no una colección de experiencias, de recuerdos? Así,
pum, un instante. Un chasquido de dedos. Una escena estática que nos trae un momento
concreto del pasado, ni real ni inventado, un híbrido en la memoria. “De cuando
Fulanita se largó de casa al fin”, “el día que perdí el autobús y me tocó
volver andando bajo la lluvia”, “la fiesta de mi décimo quinto cumpleaños”. Todos
tenemos historias así de normales. Fotografías en la memoria que uno recupera,
que uno mismo entreteje, ordena y da sentido desde la subjetividad que permite
el tiempo, ese que corre que se las pela. De esta guisa se me antojan los
relatos que componen Fin de fiestas,
de J. S. De Montfort (Suburbano Ediciones, 2014), como polaroids de la memoria,
retratos de lo cotidiano, hilvanadas y
anecdóticas.
Fin
de fiestas podría haber sido una novela si su autor
hubiera querido. Sin embargo, prefirió dejarlo en uno de esos libros
fronterizos, de género distraído, que no se adscriben del todo ni a la
compilación de relatos ni a la novela. Pese a poseer género escurridizo,
Montfort consigue que las piezas y engranajes de la historia encajen a la
perfección, se derramen y descubran un dibujo. Se trata de un libro de relatos
con un débil hilo conductor, pero que nos guía y maneja con pericia por
derroteros prefijados. Lo cierto es que tenemos una obra que se lee de la mejor
forma posible, pues Montfort ha sabido dar con el quid de la cuestión para
retratar sin retratar, para trazar personajes sin saturar. Conviven todos en el
mismo lugar y el mismo tiempo y forman parte del dibujo de una generación que
crece y sobrevive a pesar de la crisis y, en ocasiones, a pesar de sí mismos.
Fin
de fiestas se articula en torno a tres partes: “Otoño/invierno”,
“Primavera/verano” y “El largo otoño”, partes que sirven de cicerone para el
paso del tiempo y que enmarcan una serie de relatos independientes, necesarios
todos ellos dentro del mapa interno de la obra, pero aparentemente anecdóticos.
Son relatos de argumento sencillo, sin trama, sin giros, donde se nos presenta,
en la mayoría de los casos, a un personaje que nos relata un momento de su vida
en primera persona. Y esos personajes son los miembros de un antiguo grupo de
amigos, de una banda de rockers que
se niegan a madurar, La Tremenda Crew United, que ya comienzan a achacar el
paso del tiempo y tras cuyas vidas transcurren las obsesiones (Lídice y el pez rojo), las venganzas un
tanto psicóticas (Olor a pólvora y Ha sido Asier) o el desengaño (Se vende). Vidas de treintañeros
valencianos que podrían ser las vidas de cualquiera. Sí, también la suya o la
mía.
Es, por tanto, una obra
polifónica, compuesta por muchas voces, muchos puntos de vista. Se me antoja al
mismo tiempo sencilla y compleja. Sencilla porque esas voces no resultan
estridentes ni saturan el oído. Es, en definitiva, siempre la misma voz la que
habla, la voz del conjunto, del grupo, de una generación entera. Compleja
porque tras el aparente lenguaje claro, tras la ausencia de adjetivos y las
descripciones parcas, subyace un problema generacional, una decepción, un
fracaso, una interpretación rubicunda que intenta contener esta estructura de
trozos, de parches, tal vez para que no veamos toda la verdad que encierran
estas líneas.
Uno tiene al final,
cuando la fiesta acaba, la sensación de haber interrumpido algo, de haber
estado espiando a través de la rendija de una puerta las historias, los
pesares, las desesperanzas y los sueños de este grupo de chavales, que lo
dieron todo en los salvajes años de juerga juvenil y que ahora, entre estas
páginas, achacan la caída de una sociedad que, en su carrera hacia la madurez,
seguía dándoles todo hasta que la crisis hizo su aparición.
J. S. De Montfort se
estrena en el mundo de la ficción (que no de las letras) con Fin de fiestas. Ya lo conocíamos por sus
reseñas y críticas literarias en revistas como el suplemento Cultura(s) de La
Vanguardia, FronteraD, Artishock o Naif Magacine. Es, además, diplomado en
Literatura creativa y graduado en Estudios ingleses.
Título:
Fin de fiestas. Autor: J. S. De
Montfort. Editorial: Suburbano. Año de publicación: 2014.